Fomentar la coordinación entre los promotores de salud de cada pueblo con los médicos tradicionales.

Gestionar y exigir el cumplimiento de las actividades ante los entes competentes de salud, las brigadas de promoción y prevención, la cual debe incluir la medicina propia, las brigadas de salud en las comunidades, adecuación y construcción de puestos de salud y huertas medicinales.

Mediante resolución de las Autoridades Indígenas y la comunidad, se ratifique los saberes y conocimientos de los médicos tradicionales indígenas, para que ellos en determinados tratamientos y momentos puedan hacer remisiones a la medicina occidental, la cual tendrá igual validez y aceptación por parte de la Institución receptora.

Plantear al estado la formación de verdaderos promotores de salud capaces de prestar primeros auxilios al interior de las comunidades con conocimientos integrales sobre el manejo de medicamentos que sirvan de puente entre la salud occidental y el Sistema de Salud propia e intercultural indígena.

Fomentar la producción de medicamentos propios, acorde a las concepciones de cada pueblo indígena.

Estudiar la manera de fomentar en la juventud de cada pueblo el interés por la medicina propia creando incentivos para que las personas que nacen con ese don puedan aprender y recrear estos conocimientos al interior del territorio.

Realizar encuentros de sabedores indígenas de la salud para el fortalecimiento de la medicina propia y botánica de cada pueblo indígena.

Formular criterios claros de atención y administración a las personas que utilizan la Casa de Recuperación en Salud, acompañados por los médicos tradicionales. Unificar la medicina tradicional de cada pueblo indígena como herramienta para unir fuerzas de resistencia en nuestras luchas.